Huracán venció 3 a 2 a Banfield en el estadio Tomás Adolfo Ducó, en el cierre de la segunda fecha de la Liga Profesional, y culminó con puntaje perfecto tras tener los dos partidos ganados en el inicio del torneo.
Con los goles de Nicolás Cordero, Fernando Tobio y Gabriel Gudiño, el “Globo” dominó el juego pero sufrió en el complemento con el descuento del “Taladro”, con un gol en contra de Guillermo Soto. Andrés Chávez había convertido el primero de la visita.
En el momento del partido para el “Globo”, cuando más presionaba, un centro espectacular de Guillermo Benítez le permitió a Nicolás Cordero
engancharla de primera en el aire para ponerla contra el primer palo para abrir el marcador ante una defensa inmóvil. Facundo Cambeses voló, pero nada pudo hacer.
Sin embargo, el “Taladro” fue ganando terreno y el local se quedó sin ideas promediando la primera etapa. Un córner desde la izquierda de Brahian Alemán, con un pique en el área chica, le dio la oportunidad a Andrés Chávez de aplicar la ley del ex para empatar el partido, con una volea de zurda por detrás de todos al primer palo.
El equipo dirigido por Diego Dabove no se quedó atrás y fue a buscarlo con todo su arsenal, hasta que desde un tiro de esquina llegó el triunfo parcial: un gran centro al medio del área de Jonás Acevedo, que encontró muy bien en el aire Fernando Tobio, le permitió poner en ventaja al dueño de casa.
En el cierre de la primera mitad, Lucas Chaves sacó un remate desde su propia área, Emanuel Olivera no pudo calcular bien el pique y dejó expuesta a su defensa. Matías Cóccaro cubrió bien a Alejandro Maciel y Gabriel Gudiño tomó el fallido despeje del central y la colocó con suavidad al segundo palo, lejos de Cambeses.
Ya cuando el encuentro no tenía tantas emociones y el dominio del “Globo” había pasado, Banfield se animó a pasar al ataque y consiguió el descuento: un muy buen centro de Coronel, que no encontró a nadie de Banfield en el área pero si a Guillermo Soto, quien con infortunio metió la pelota en su propia valla después de que le rebotara en la pierna.
