Faltan 101 días para que Mariano Arcioni entregue la banda y el bastón de Gobernador de Chubut. Se muestra conforme con lo realizado pese a las dificultades que le tocó atravesar. Se siente con la tranquilidad “del deber cumplido”, según él mismo afirma. Reconoce que en el repaso de su gestión hubo cuestiones que podría haber abordado de otro modo, pero su balance en general es positivo y lo remarca con datos.
Pero también entiende que es tiempo de responder a acusaciones y agravios del que fue blanco durante la reciente campaña provincial y en la que no fue candidato. Algunas acusaciones parecen haberlo afectado más, sobre todo cuando se trataron de poner en duda la buena intención de determinadas acciones de gobierno. A quienes lo negaron o a aquellos que pretendieron culparlo de una derrota sin asumir responsabilidades propias, casi que los ignora. Y el desaire puede ser aún más significativo que marcar el reproche.
Arcioni y la transición de gobierno.
Es aún gobernador en ejercicio y muestra voluntad de asfaltar el camino a su sucesor, Ignacio “Nacho” Torres, con quien estuvo reunido dos horas esta semana acordando cuestiones de la transición. Si bien Arcioni no tenía un pasado político cuando asumió el rol de vicegobernador primero y de gobernador después, las tormentas que le tocó atravesar desde el poder le atribuyen la experiencia necesaria para sugerirle a Torres que “el enoje no le nuble la razón”, como le planteó el último lunes en aquella reunión en Comodoro Rivadavia.
Durante la entrevista concedida al programa Sin Hilo, por Canal 12, el gobernador está distendido, sonríe y se explaya al hablar de los objetivos logrados durante su gestión. Sólo toma un gesto adusto cuando responde acusaciones recibidas durante la campaña; se involucra en la elección presidencial y se empeña en resaltar la figura de su amigo y líder político, Sergio Massa.

Arcioni criticó con dureza al vicegobernador electo Gustavo Menna
Sólo hubo tensión en el momento en que Arcioni elige a Gustavo Menna como blanco de todos sus cuestionamientos. El vicegobernador electo había criticado alguna contratación para determinada obra pública y el mandatario en ejercicio no lo acepta: “No lo voy a permitir, Menna es un irresponsable y quiere gestionar con rencor y resentimiento”, lanzó Arcioni sin ocultar su enojo porque se puso en duda su honestidad.
Tal vez porque supo tener buena relación con Menna es que se marca tanto su enojo; compitieron en la elección de 2019 en la que Arcioni logró ser gobernador electo tras completar el mandato de Mario Das Neves y aquella fue una campaña en buenos términos.

Pero si le dedica tiempo a responder al radical Menna, prefiere casi la ignorancia para los aliados políticos Juan Pablo Luque y Carlos Linares. Al actual presidente del PJ ya le ganó también en elecciones pasadas y se lo recuerda al pasar con cierta sonrisa burlona, pero no pierde un segundo más en hablar sobre uno de los políticos más críticos de su gestión, aunque integra el mismo frente electoral.
Arcioni y el análisis de la derrota de Luque
Hasta ahora Arcioni había esquivado hacer referencias a Luque, quien se cansó de negarlo en la campaña por la Gobernación y de marcar diferencias pese a haber sido aliados. Si hasta cuestionó el adelantamiento de la fecha de la elección que el propio comodorense había pedido. Ahora, Arcioni piensa, hace una pausar y parece reservarse mucho de lo que tiene para decir en algún encuentro cara a cara con Luque, de quien al menos espera primero una autocrítica porque “no que hay que castigar a alguien cuando está en el piso”.
#SinHilo
— Canal 12 (@Canal12web) August 31, 2023
"Por esa actitud que ha tenido Luque tuvo los resultados. Una actitud negacionista, no respetar acuerdos" Mariano Arcioni, gobernador de Chubut
Si a Menna le dedica varios momentos de la nota, a Linares y Luque los desaira, o tal vez se controla porque aún es el Gobernador. Pero él mismo reconoce que “tenía ganas de hacer una devolución” de todo aquello de lo que fue blanco durante el tiempo de la campaña y aún después. Por entonces no quiso hablar, ahora lo hace en cuenta gotas, pero los gestos, posturas y hasta el modo de ignorar a determinados dirigentes dicen mucho.
Ultimo trimestre de la gestión Arcioni
A poco más de 3 meses para culminar su mandato, Arcioni siente que es tiempo de hacer balances, pero sin descuidar el tiempo que queda para administrar la provincia. Prepara una rendición de cuentas y aprovecha el tiempo para resaltar lo que entiende han sido logros de su gobierno. Mientras tanto, aprovecha para resaltar la figura de Sergio Massa como candidato a Presidente, algo que otros socios electorales abandonaron y se apartaron de la campaña. Arcioni ya no los cuestiona y se aboca a hacer el esfuerzo por su candidato mientras acomoda la transición a un nuevo Gobierno en la provincia. Está claro que después del 10 de diciembre seguirá siendo un referente político activo y con aspiraciones.